
Criollamente nutritiva
Recuerdo entrar en la cocina y sentir ese olorcito tan agradable, el olor de un almuerzo calientito, de un guiso recién cocinado, en general el olor del amor. Miraba a mi abuelita cocinar con tanta ternura y cariño que todo tenía un sabor especial. Es por eso que ser parte de una cultura maravillosa es algo que me llena de orgullo, no solo por sus sabores deliciosos sino por todo a lo que me remonta, mi niñez contada a través de cada plato, todo mi pasado e historia g